En Perú, la venta de vehículos ha experimentado un crecimiento moderado en los últimos años. Para el 2024, se espera que las ventas de vehículos livianos nuevos alcancen las 167,900 unidades, lo que representaría un crecimiento del 2,1% respecto a las 164,485 unidades vendidas en 2023. Sin embargo, a la hora de adquirir un vehículo, uno de los dilemas más frecuentes que enfrentan los compradores es la elección entre un auto mecánico o automático.
En cuanto a las preferencias por vehículos mecánicos o automáticos, no existen cifras concretas que midan específicamente esta división. Si bien, la tendencia global y regional muestra un crecimiento en la demanda por vehículos automáticos, dado su comodidad y facilidad de uso en el tráfico urbano, en mercados como el peruano, los vehículos mecánicos siguen siendo populares debido a sus costos más accesibles y menores gastos de mantenimiento.
Diego Aldon, Subgerente de Ventas de Mitsui Automotriz señala que, ambas opciones presentan beneficios según las necesidades del usuario: mientras que los vehículos automáticos ofrecen una mayor comodidad y eficiencia en entornos urbanos, los vehículos mecánicos destacan por su bajo costo y su capacidad de proporcionar un manejo más activo, lo que los hace preferibles para muchos conductores en diversas situaciones.
¿En qué se diferencian?
Respecto a las diferencias, la principal radica en que, con la caja mecánica, el conductor realiza los cambios de marcha manualmente, ajustándolos según la necesidad, la velocidad y la respuesta que desea obtener del vehículo. En cambio, con la caja automática, es la computadora la que determina el cambio adecuado en función de la demanda de conducción, dependiendo de cómo el conductor presione el acelerador.
¿Qué tipo de vehículo elegir?
Elegir entre un vehículo de transmisión mecánica o automática no siempre es una decisión fácil, ya que depende de diversos factores relacionados con las necesidades del conductor y su estilo de vida. Bajo ese contexto, el subgerente de Ventas de Mitsui Automotriz señala tres factores clave a considerar al asesorar sobre la elección de transmisión:
- La fuerza de la costumbre: Si el cliente ha manejado vehículos mecánicos durante años, se siente confiado y cómodo con este tipo de transmisión. En estos casos, no es recomendable intentar cambiar su preferencia, ya que los conductores de vehículos mecánicos suelen disfrutar del control que les proporciona el cambio de marchas manual.
- Problemas físicos: Si el cliente tiene alguna condición médica que afecta las rodillas o los tobillos, es recomendable optar por un vehículo automático. Con un vehículo mecánico, el conductor debe pisar el embrague constantemente para cambiar de marcha.
- El tráfico de la ciudad: Esta problemática muchas veces es el detonante para que las personas decidan entre manejar vehículos con caja mecánica o automática, ya que tienen que realizar cambios constantemente en cada semáforo o en situaciones de congestión.
Cabe resaltar que, el tipo de caja de un vehículo ya sea mecánica o automática, no afecta de manera significativa el valor de reventa de este. Este valor se determina principalmente por factores como el año de modelo, el estado de conservación, el kilometraje y la marca.
Para Diego Aldon, la elección entre un vehículo con caja mecánica o automática está relacionada con las necesidades específicas del cliente, incluyendo el tipo de modelo, el precio y las condiciones de uso de la unidad. Por ejemplo, en el sector minero, donde la durabilidad y el control son esenciales, el 95% de los compradores opta por vehículos con transmisión mecánica como el Toyota Hilux. En contraste, para un vehículo familiar como el Toyota Rush destinado a paseos y uso urbano, la preferencia se inclina hacia las transmisiones automáticas, que brindan comodidad y facilidad en el manejo, especialmente en condiciones de tráfico intenso.